Tener el coche en buen estado es de vital importancia y ha de ser una de nuestras prioridades para conducir con total seguridad y evitar cualquier tipo de contratiempo durante los viajes. Por ello, en este post queremos darte algunos consejos que debemos tener en cuenta antes de pasar la revisión del coche de verano. ¡Vamos allá!
Tabla de contenidos
Los mejores consejos para la revisión de verano del coche
Efectuar una revisión no llevará mucho tiempo, pero te ahorrará muchos problemas en la mecánica y cualquier tipo de avería. Los mejores consejos que debemos tener en cuenta son los siguientes:
Comprobar el aceite del motor
El aceite es de vital importancia para evitar que la unidad de potencia pueda gripar. Recuerda que quedarte sin ese líquido significará una rotura y prácticamente decir adiós al vehículo. Por tanto, hay que evitar esa situación de incomodidad a lo largo de un viaje. Además de llamar a la grúa, tendremos que interrumpir nuestras vacaciones, y quizás incluso comprar un coche totalmente nuevo. Las vacaciones que NADIE quiere tener.
En este mismo blog hemos hablado varias veces de la necesidad de mantener siempre el aceite de nivel en buen nivel para que todas las piezas estén lubricadas y no se produzcan los problemas que comentábamos hace solo unas líneas. Además, es importante que el aceite del coche sea de buena calidad para evitar problemas a largo plazo.
Revisar los frenos
Las pastillas de frenos son otra de las partes fundamentales en nuestro vehículo. Son los que nos permiten detener el coche en cualquier momento. En el caso de que estén muy gastadas, es muy recomendable cambiarlas antes del verano, especialmente con la subida de las temperaturas.
Una señal inequívoca de que hay que cambiarlas es si se oye un ruido metálico al frenar. Esto significa que las pastillas se han desgastado y se empieza a rozar con el disco. Unas pastillas gastadas pueden aumentar el tiempo de frenado muy por encima de lo recomendable, lo que puede desembocar en un accidente en carretera.
Ajustar la presión de los neumáticos
Además de los frenos, no podemos olvidarnos de los neumáticos. Son la parte que hace contacto entre el coche y el asfalto. La presión y el dibujo han de ser correctos para conseguir una buena adherencia.
Asimismo, es recomendable que cambiemos los compuestos y utilicemos los de verano. Son un tipo de goma que rinde mejor cuando las temperaturas son altas. De hecho, los pinchazos o los fallos de neumáticos son una de las causas principales de contratiempo a lo largo de un viaje.
Recuerda que disponemos de un servicio con el que podrás comprar ruedas usadas de calidad garantizada al mejor precio.
Comprobar que el aire acondicionado funciona
Poder refrescarse durante el verano es primordial, especialmente cuando conducimos. Por tanto, el aire acondicionado es otra de las partes obligatorias que hay que revisar. No hay nada más desagradable que viajar durante horas una tarde de verano mientras nos horneamos lentamente en el interior del coche.
Recuerda cambiar o limpiar los filtros del aire todos los años para evitar que el polen y la suciedad atasquen la abertura y el aire frío no pueda llegar al interior de la cabina.
Equipamiento auxiliar
Disponer de una rueda de repuesto, un chaleco reflectante y el triángulo de seguridad es una obligación que debemos cumplir. Y mucho más si salimos de viaje durante el verano. Por ello, es importante verificar que estos elementos están en buen estado por si surge un contratiempo. A estas alturas, también os recomendamos llevar siempre en el coche una luz de emergencia para colocar en el techo en caso de que suframos una avería.
Cuando se produce un choque o avería mecánica, son fundamentales para poder resolver ese tipo de situaciones con total confort.
Las luces deben iluminar
En las vacaciones se producen viajes largos donde se conduce por la noche. También nos gusta coger el coche para salir cuando se pone el sol. Para conducir con total confort, el sistema de iluminación debe estar al máximo nivel. Esto incluye tanto las luces de posición como las largas.
Es recomendable aprovechar para revisar las luces de freno y también los intermitentes. De esta manera, alertaremos al resto de conductores de todas nuestras maniobras.
Echar un vistazo al parabrisas
Los limpiaparabrisas son muy útiles, especialmente cuando llueve o se empaña el vidrio. Debemos revisar que funcionan adecuadamente y, además, que el líquido es suficiente. La falta de visibilidad es otro de los contratiempos principales con los que podemos encontrarnos.
También recomendamos renovar las esponjas de vez en cuando para evitar que los cristales puedan estropearse con su uso. Unas esponjas desgastadas por el uso serán incapaces de absorber y eliminar el agua de lluvia y terminarán provocando que en los cristales aparezcan marcas y rayas.
Revisar los amortiguadores
Finalmente, los amortiguadores son otra parte de nuestro coche a la que debemos prestar atención, ya que afecta de forma directa a nuestra estabilidad. Es importante que los amortiguadores sean capaces de absorber los impactos con facilidad para evitar que, antes un accidente o cambio brusco de rasante, el coche pueda reaccionar con estabilidad.
Listas de espera en los talleres
Cuando se acerca el buen tiempo, miles de conductores llevan sus coches a los talleres para la revisión de verano, por lo que puede que, si lo dejas para el último momento, ningún taller pueda revisar tu coche antes de que te vayas de vacaciones. Desde Desguaces Albacete recomendamos realizar la revisión en abril o mayo para que los profesionales tengan tiempo suficiente como para revisar el coche en profundidad y realizar todas las reparaciones que sean necesarias.
Como conclusión, la revisión del coche antes de verano es de vital importancia para conducir con seguridad y comodidad, evitando cualquier tipo de situación incómoda.